domingo, 26 de abril de 2020

La policía de Madrid interrumpe la misa del párroco Roberto Baker


El cura Roberto Baker, párroco de la iglesia de Hoyo durante los años 2016-2018 y actualmente de la iglesia San Jenaro de Madrid, fue interrumpido en la misa de resurrección que estaba celebrando en el patio de la iglesia por dos agentes de la policía municipal madrileña.
Durante la celebración de la misa, uno de los policías se acercó al altar para informar al sacerdote del incumplimiento de las normas de confinamiento por estar en la vía pública, a lo que el cura Baker respondió que se encontraba en el patio y no en la calle, esgrimiendo el artículo 11 del decreto de alarma, en el que se basa para celebrar la misa, pero terminó aceptando el requerimiento policial.
El párroco decidió continuar la misa en el interior del templo y pidió permiso para mantener los altavoces fuera, pero los agentes se lo denegaron.

7 comentarios:

Alex 33 dijo...

Que vergüenza. Primero por acceder a una propiedad privada sin permiso. Luego por el atropello

Antonio García dijo...

¿Atropello? La ley está para cumplirla. Vergüenza la que pareces que no tienes tú mismo.

Doc dijo...

Me gustaría ver si tienen los mismos "argumentos" si fuera un rezo en una mezquita.

veoveo dijo...

Ni mezquita ni iglesia ni nada. Nos jugamos mucho, este virus es muy contagioso. Además los católicos tienen la suerte de que tienen la misa en televisión

Doc dijo...

Son ganas de retorcer las cosas. Este cura está solo, sin nadie delante.
Sin embargo el agente que le reprende no lleva mascarilla, y eso si es más peligroso que dar misa al aire libre. No sabemos el contacto de este agente en el acto de sus funciones, ni con quien ha estado. Si nos la cogemos con papel de fumar tiene que ser para todos, empezando por los políticos que están en el Parlamento sin mascarillas. O es que esos no cuentan.

Antonio García dijo...

Estimado Doc. Si es una mezquita digo lo mismo, la ley está para ser cumplida. Es para todos, no hay diferencia.
Por otra parte, lo que hace este cura; aparte del confinamiento, es infringir lo normativa de exceso de ruidos. En su favor está que educadamente no se opone a la llamada de atención por parte de la policía y accede a las normas; lo que podría conducir a que no se le impusiera multa por reconocer la situación (no se exime el desconocimiento) y a pesar de su desafío inicial probablemente influenciado por grupos extraños con intereses desestabilizadores-

Doc dijo...

Hola Antonio. La primera parte de su exposición la apoyo. La ley es para todos.
Ahora, por otra parte, en la normativa de exceso de ruidos, también nos excedemos todos a las 8 de la tarde con aplausos y poniendo música en los balcones a volumen alto.
Tenemos que saber donde está los límites de lo racional y de la lógica. Todos los días cometemos actos que seguramente serían reprochables, pero que cada uno los ve desde su punto de vista. Seguro que un católico y un ateo tienen su opinión diferente sobre la actitud de este cura. Yo no le defiendo porque yo sea una persona religiosa, solo voy a misa cuando hay una boda o una comunión, pero el exceso de celo en esta situación no la veo normal.
En cuanto a los intereses desestabilizadores, no se por donde van los tiros, pero sigo pensando que estos dos agentes no los veo en puerta de la Mezquita de la M-30 con esta actitud, quizá si con tres o cuatro furgones antidisturbios.