martes, 29 de noviembre de 2016

El vidrio también contribuye a descubrir la historia de Hoyo

Francisco Capel, Mª Angeles Villegas, Miguel García y José Luis Soriano, coordinador.
Los restos de vidrio hallados en el Yacimiento de La Cabilda también están aportando datos sobre la historia de Hoyo de Manzanares, según se deduce de la conferencia impartida el pasado viernes 25 de noviembre en el Centro de Cutura de Hoyo de Manzanares por especialistas con una dilatada carrera profesional que vive en Hoyo o tienen una relación de proximidad.
Para poner en antecedentes, Francisco Capel del Águila, doctor en Ciencias Químicas,licenciado en Ciencias Sociales, hizo un exhaustivo  y documentado repaso a la historia del vidrio empezando por su origen en Oriente Medio, entre los ríos Tigris y Eúfrates, entre las regiones de Alejandría y Sidón, si bien su fabricación de forma regular se inició en Egipto en el siglo XVI antes de Cristo. Fruto de la combinación de arena de sílice, caronato de sodio y caliza a altas temperaturas ( unos 1.500 grados), el vidrio se fue extendiendo por Siria, Roma..., pasando de ser de carácter suntuario a uso utilitario, configurando diversos objetos, tanto decorativos como de uso común. A lo largo de estos años y siglos, han dejado huella el vaso de Diatreta, la patena de Cástulo, las vidieras en el románico y gótico que pasaron de servir de iluminación a ser didácticas (las primeras en España fueron las del Monasterio de Las Huelgas (Burgos), los espejos de Venecia (S. XIV),...hasta las botellas de hoy en día, por ejemplo.
Después de esta introducción histórica del vidrio y del cristal, se presentaron los resultados de caracterización físico-química de unos vidrios pertenecientes a los yacimientos arqueológicos de Navalahija y La Cabilda. Esta presentación estará a cargo de los doctores Manuel García Heras y  Mª Ángeles Villegas Broncano, investigadores del CSIC. El primero señaló que los restos hallados, como bordes de vasos, vasijas, etc. "no se encuentran demasiado bien afinados", concluyendo que se trata de vidrios de silicato sódico calcico compatibles con otros, posiblemente reciclados de la época tardorromana (s.V y VI d.C.). Por su parte Ángeles añadió que el color dominante de los vidrios del yacimiento de La Cabilda son azulverdoso, con presencia de iones de hierro. y son bastante distintos, debido a la presencia de óxidos de cobre, zinc, estaño, antimonio y plomo.  Ambos destacaron que no hay evidencias de hornos en la zona, por lo que es probable que los vidrios fueran traídos de otros lugares, quizá de Colmenar Viejo.

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