lunes, 14 de noviembre de 2011

Taller para jóvenes sobre talento personal

El próximo domingo 20 de noviembre se va a celebrar el taller "Arqueología del talento para adolescentes y jóvenes", un entretenido viaje de investigación personal para que los jóvenes descubran más acerca de si mismos, tomen conciencia de sus intereses, vocaciones, capacidades y talentos. Con este taller, la organización Preparados para Aprender persigue potenciar sus talentos, orientarles y fortalecer su autoestima.
La cita es el 20 de noviembre desde las 10:30 en la Casa Rural en K la abuela, con la colaboración del Centro de estimulación temprana, terapia visual y atención psicopedagógica, Preparados para Aprender.
Más información.

25 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Vocaciones?
En pleno siglo XXI seguimos todavía con esas historias.

Anónimo dijo...

Pues sí señor, sin vocaciones no hay más que ganado. Y aún hay quien es trabajador vocacional. Hay que despertar.

Anónimo dijo...

Despierta de tus pesadillas.
Casi todo el mundo, excepto un porcentaje de afortunados que les gusta su trabajo, está deseando dejar de trabajar.
No nos cuentes batallitas que ni tú te crees, y lo que es peor, ofendes a la gente que se tiene que ganar el pan todos los dias con mucho esfuerzo y mal remuneradas en profesiones poco gratificantes.

Anónimo dijo...

Parece ser que hay mucha más gente necesitada del taller, por el comentario anterior

Anónimo dijo...

El sistema ofrece oportunidades a todo el mundo, quien de verdad quiere, se sube al carro. Lo que falta es voluntad, espíritu de sacrificio, entrega, abnegación, autodisciplina y todo eso que ya sabe usted, y lo que sobra es pereza, comodidad, autocompasión y esas otras que también conoce. El trabajo dignifica excepto a los parásitos sociales.

Anónimo dijo...

Pero que falta de sensibilidad y de respeto a la gente que tiene que asumir una dura existencia, que es la inmensa mayoría.
Después de la soflama absurda, cursi y delirante, les ha faltado poner el lema nazi arbeit macht frei. Sería el digno colofon de vuestro alucinado discursito.
Me parece que no llevaré a mis hijos, prefiero enseñarles respeto a los demás que no han tenido la misma fortuna en la vida qiue la que se supone que tendrán ellos. La vida da, a veces, muchas vueltas.

Anónimo dijo...

En fin, un minidebate demasiado encendido (y ofensivo). No sé a qué se referirá con la "dura existencia"; yo, desde luego he visto la auténtica miseria del ser humano de primerísima mano (hambre, miedo, desesperación, odio, pobreza -de la de verdad-, muerte, etc.) así como he conocido gente absolutamente entregada a su trabajo, y no por dinero. Soy consciente de lo que soy y a quien se lo debo (más que nada a mi particular esfuerzo), mi trabajo nunca estuvo bien remunerado, pero lo amo y estoy orgulloso de mi esfuerzo y dedicación del mismo modo que lo enarbolo como bandera humilde para mis vástagos. Igualmente, insisto en que conozco y he conocido en muchas partes del mundo trabajadores vocacionales de cualquier tipo, empezando por religiosos, militares, carpinteros, albañiles, maestros, jardineros, médicos, herreros, deportistas y casi cuantos la imaginación dicte. Por supuesto que también los conozco desencantados con y sin razón, pero de lo que estoy convencido es de aquello que mencioné al principio de que su sistema ofrece oportunidades infinitas, pero no gratis (excepto para algunos, que al cabo no dejan de ser otra especie de parásitos sociales. Quede claro que me refiero a los hijos del enchufismo con el que tampoco estoy de acuerdo). Y no entiendo su cita porque aún no sé alemán (aunque puedo hablarle en otros idiomas).

Anónimo dijo...

Seamos realistas,estamos inmersos en una crisis de valores que no nos conduce a nada bueno. Todo lo que sea formativo en ese sentido es bueno para la sociedad, gracias por iniciativas como esta.

Anónimo dijo...

Es el cartel que aparece en la entrada del campo de exterminio de Auswitz que saluda a los condenados a trabajar hasta la muerte. Significa el trabajo os hace libres.
Lo más cruel es que al final era cierto, ese trabajo les liberaba irreversiblemente de su cautiverio cuando eran asesinados.
Es la vida real, sin ensoñaciones fundamentadas en conceptos esotéricos.
Es muy digno el esfuerzo, el mérito, la disciplina y la satisfacción por el trabajo bien hecho, e incluso el amor por el trabajo, pero hay que asumir la realidad que usted mismo reconoce.
Es inadmisible conceptos como parasitos sociales, pereza o vocación.
Piense en la cantidad casi inimaginable de seres humanos que han perecido ahogados intendado alcanzar las costas de nuestro pais. O en el rio Grande entre Méjico y EEUU. Su única "vocación" era intentar tener una vida mejor.
No queremos niñatos malcriados, pero los que padecen, los que no han tenido oprtunidades, merecen un respeto.

Anónimo dijo...

Naturalmente aquel trabajo no dignificaba a nadie como no lo hacen otros muchos que aún existen en calidad de semi-esclavitud (o esclavitud total). Los conceptos como parásito social, perezoso, comodón, niñato malcriado y demás son los que se deberían de algún modo (no drástico, desde luego) ser condenados, pero otros como vocación, entrega, compromiso y los que ya huelga mentar aquí deben ser bandera.
Sinceramente creo que tanto Usted como yo conocemos la realidad, la que es, la mala y la buena y lo único que hacemos es un enfoque con dos prismas contrapuestos. Precisamente los necesitados demuestran el "pecado" del hombre que tinta su vestimenta de hipocresía o indiferencia, pero enfrente de estos se encuentran los voluntarios, los asistentes sociales, los misioneros, los médicos sin fronteras, Cáritas y tantos como muestran la cara saludable del ser humano.
Y yo soy de los que piensan que a Maquiavelo le amparaba en buena medida la verdad; pero me quedo con el ejemplo que me ofreció mi Madre que desahuciada como estaba se empeñaba aún en entregar hasta su último aliento para ayudar a los necesitados. Ese y no el enfoque de negatividad y desesperación que tantas veces nos persigue es el estandarte que prefiero.

Anónimo dijo...

Bien por el debate abierto sobre la juventud. Ellos tienen un gran problema porque son el futuro. Si no se cuidan ellos, mal lo llevan.

Anónimo dijo...

Lo que no puede ser es que nosotros entremos a formar parte del problema de los jóvenes por el empeño en resolverles cualquier bache, por pequeño que sea, que la vida les presente, con lo cual, lo único que conseguimos es que se apoltronen y se alimenten de la sopa boba, perdiendo la capacidad de ser auto-suficientes.
(Por ejemplo)
Eso sin redundar en la ausencia de valores y de referentes a seguir de calidad.

Anónimo dijo...

Las familias sensatas y con buen nivel cultural dan los referentes adecuados.
Las que carecen de esa circunstancias dejan un rastro lamentable.
A los hijos les pasa lo que a los perritos caseros que si no les indican las normas más elementales acaban destruyendo la casa y hacen la vida imposible, la suya y la de los demás.

Anónimo dijo...

Ese no es precisamente el referente ya que no todas las familias gozan de ese nivel cultural (por lo que sea), de modo que el estado debe ser necesariamente quien garantice las oportunidades y el que consensuadamente oriente la formación básica de sus súbditos. (Que no quiere decir que los adoctrine según el gobernante de turno...)

Anónimo dijo...

La educación se adquiere en el entorno familiar. Y si no hay lo que tiene que haber se crian animalitos que dan coces. No te olvides de la sensatez, que es lo más importante.
En los centros de enseñanza no se recibe ninguna educación, mas bien al contrario. En estos sitios se enseña matematicas, ingles, historia. La señal más evidente de que un chaval va a carecer de educación es precisamente esa, la madre que piensa que en los colegios tienen que educar a sus hijos y que no es su cometido y su responsabilidad.
Claro que a las pobres las lían llamando a eso educación, en lugar de definirlo como enseñanza o formación academica.

Anónimo dijo...

Lo normal es que un profesor, de lo que sea, tenga serias dificultades en enseñar su asignatura porque los niñitos no tienen la mínima educación.
Al cole se sale de casa ya lavadito, peinadito y educadito.
Lo de la formación ¿básica? y la garantía de la supuesta iguladad de oportunidades va mucho después.

Anónimo dijo...

En "esos sitios", como Usted los llama, (escuelas, colegios, universidades, institutos..) en otros países (especialmente de Europa Occidental: Francia, Alemania, Gran Bretaña...) hoy, y en el suyo en otro tiempo se enseña además de cultura, convivencia, educación, respeto, valores (que alguien mencionó)... Lo que les ocurrió a ustedes es que no hicieron una lectura detenida de su pasado, que es lo que se hace para desterrar defectos y anotar virtudes, más que nada porque de todos los sistemas de gobierno puede extraerse algo bueno, y ustedes solo se dedicaron a borrar lo que fuera parte del pasado sin medir sus consecuencias. La educación de los hijos se forja tanto en casa como en los centros educativos y el estado debe velar porque así sea.

Anónimo dijo...

En los sitios normales el profesor de lengua enseña su asignatura, el de matematicas la suya, y así todos.
Supongo que si el sitio es normal se exigira al profesorado que se comporte con una exquisita educación.
Cuando se enseña otras cosas ajenas a las materias docentes es que se hace proselitismo (político, religioso) con las pobres criaturas menores de edad.
Y eso ocurre porque hay mucho adulto abusón que carecen de cualquier principio o valor.

Anónimo dijo...

Le suena a usted la frase "son cosas de niños" ¿Verdad que si?
Es la frase típica que corresponde a la inhibición de todo quisqui cuando un pobre niño se va aplastado por algunos indeseables ante la pasividad insensible de los profesores de cualquier centro, que no sólo no se implican en en enseñar cultura, convivencia, respeto, sino que no cubren las minimas expectativa de auxilio al necesitado.
El mundo, la gente y los profesores SOMOS así.

Anónimo dijo...

Aquí hay alguno que quiere tener la posibilidad de comerle el coco a los pobres niños con "su educación", "sus principios", "sus valores", "sus dioses", "sus fantasmas","sus obsesiones", "sus delirios" y "sus tontunas".
La educación que se adquiere en la familia no es válida, la importante es la que yo inculco en mi centro para tener acólitos infantiles. Dejadme que yo eduque a las criaturas.Claro, claro.
La pena es que este tipo de conductas no esté tipificado como delito.

Marco Antonio dijo...

Educar es mas complicado de lo que yo podía pensar, afortunadamente mis delirios de grandeza en los que veo a mis hijas de abogadas ingenieras médicos ha terminado.
dejo que sean ellas las que busque su enfoque talento o don, segun sus propias creencias para que puedan encaminar su futuro por donde ellas consideren que estan preparadas o por lo menos por el camino por el cual ellas se siente que lo pueden hacer sin mucho esfuerzo, por que se ha terminado ya la teoría del esfuerzo, y ha comenzado la era de la eficacia, si haces mucho esfuerzo en conseguir algo posiblemente no estés preparado para aquello,sin embargo si hay algo que consigas sin esfuerzo ese es tu camino.

Anónimo dijo...

Marco Antonio tu teoria me parece interesante y brillante, aunque no acabe de compartirla. Es otro punto de vista. No creo que se consiga nada sin esfuerzo.
Te deseo toda la suerte.

Marco Antonio dijo...

Estimado lector, posiblemente no me haya expresado bien, y por ello quisiera poner un ejemplo.
Si yo hago un esfuerzo enorme por ser sociable y no lo consigo, posiblemente tenga que aceptar que mi don no es el de ser una persona sociable, pero lo tendré que aceptar,como soy y buscar que cosas puedo hacer que no sea cara al publico donde pueda ser mas eficaz, que no eficiente ,
Yo tambien te deseo el mayor de los exitos en todo cuanto hagas

Anónimo dijo...

Me parece interesante que el Ayuntamiento organice estos talleres

Anónimo dijo...

Para Marco Antonio y a quien pueda apetecerle, os recomiendo una canción que viene muy al caso: "Quiero ser bombero". La cantaba Alberto Cortez con el fallecido Cabral.